Viernes 16 de Mayo de 2025

Hoy es Viernes 16 de Mayo de 2025 y son las 10:04 -

  • 21º

09/05/2025

Amador Sánchez Rico: “El acuerdo Unión Europea–Mercosur enfrenta la hora de la verdad”

Fuente: 1746787683

El embajador del bloque europeo habló con Infobae sobre la actualidad de las relaciones bilaterales. Los desafíos, las oportunidades de inversión y desarrollo y el final de su misión en Buenos Aires

>“Llevo 26 años trabajando en la Unión Europea y desde que entré en Bruselas, en 1999, el acuerdo con el Mercosur ya era un tema caliente. Han pasado 26 años y llegamos a la hora de la verdad”, reconoce Amador Sánchez Rico, embajador de la Unión Europea en Argentina, al comenzar el balance de su misión diplomática, que culmina en septiembre. “Creo que todos los astros están alineados”.

Además, el embajador destaca los instrumentos con los que cuenta la Unión Europea para apuntalar la relación bilateral, como el programa Global Gateway, que ya está promoviendo inversiones europeas en energía, minerales críticos y nuevas infraestructuras. “Lo que pretendemos es generar empleo y valor agregado en toda la cadena de valor, con inversiones responsables y transparentes”, explica.

– Está celebrando el último Día de Europa de su misión en Argentina ¿Cómo enfrenta esta etapa? Le pido un balance de estos años.

¿Y qué es lo que queda? Porque, al fin y al cabo, yo no soy más que un eslabón en la cadena. Creo que, como dice Machado, “todo pasa y todo queda”. Paso yo, que soy un eslabón más o menos resiliente, pero quedan dos cosas: queda el equipo que estaba aquí y que va a seguir con esta agenda; y quedan estos vínculos históricos tan fuertes, tan enraizados entre la Unión Europea y los argentinos, que es lo que más me sorprendió al llegar aquí.

Tenemos un pasado enorme en común, pero ahora el gran desafío es el de capitalizar eso y sacarle el máximo provecho, el máximo potencial a esta relación histórica. Hay mucha presencia europea aquí: presencia europea cultural, en inversiones, económica, comercial. Hay entre más de 800 empresas europeas en este país, del stock de inversión extranjera directa estamos superando el 40%, pero hay margen para mucho más. Tenemos el programa Global Gateway para promover inversiones.

– El tema del acuerdo Unión Europea Mercosur puede representar el tema más importante que tuvo en sus manos. ¿Cómo vivió esa negociación y cómo está hoy ese acuerdo en términos concretos y qué perspectiva tiene para adelante sobre lo que va a ocurrir?

Estamos en un momento de muy poca colaboración a nivel internacional, un espíritu transaccional muy agudo en todos los niveles. Estamos con una muy poca previsibilidad, con unas reglas de juego que cambian de la noche a la mañana. De repente, los amigos se convierten en enemigos y viceversa. Este acuerdo creo que representa todo lo contrario: representa previsibilidad, representa cooperación, representa multilateralismo y sobre todo es un marco de reglas claras para que los operadores -que son al fin y al cabo, los que arriesgan en sus inversiones-, los actores económicos sepan a qué atenerse.

– Esos rubros específicos generan las dificultades para terminar de poner en marcha el acuerdo. Me refiero en concreto al tema agrícola. ¿Qué es lo que ocurre que no se puede o que se traba el tramo final del acuerdo?

- Son procesos. Lo hemos visto también con otros acuerdos comerciales. Son procesos también de ratificación complejos. En Europa se requieren unas mayorías que dependen de qué tipo de estructura se le dé al acuerdo. Son procesos de ratificación complejos y eso hace que el proceso se haya demorado tanto. Hay que primero explicar bien los datos y tener un debate sincero sobre lo que está en juego. Se escriben a veces cosas que a uno le cuesta un poco creer, en cuanto a quién pierde, quién gana. Hay que poner todas las cifras y tenemos que tener un debate sincero y honesto.

– Desde el lado europeo, tenemos un proceso de 27 países, con unos mecanismos de aprobación y ratificación que son complicados, razón por la cual esto puede ralentizar un poco este tipo de acuerdos. Del lado del Mercosur diría dos cosas: uno, estamos hablando aquí de dos economías, dos bloques, muy diferentes y complementarios. Por un lado, tienes un mercado de 450 millones de habitantes -como es el bloque europeo de 27 países- muy integrado, muy integrado. Somos el mercado o el bloque comercial más grande del mundo, con mayor integración.

– Monolítico.

Creo que se le puede dar la vuelta a ese argumento y se le debe dar la vuelta a ese argumento para decir: un acuerdo como el de la UE y el Mercosur va a servir a fortalecer el bloque del Mercosur y va a ayudar a mejorar y a engrasar toda esta maquinaria y todo este bloque.

– Hay una guerra en Europa en medio de este proceso tan extraño que está viviendo el mundo en los últimos. Lo que ocurre en Ucrania y Rusia y domina toda la agenda. ¿Cómo vivió ese momento y cómo impactó en la misión diplomática?

Una invasión en toda regla, a gran escala, una invasión bajo pretextos totalmente falsos. Esto fue fruto de un revisionismo histórico, un revanchismo. Es verdad que estamos a 12.000 kilómetros de Ucrania, que parece mucho, pero esto no es un tema simplemente de Ucrania. Esto es una violación flagrante del orden internacional, basado en reglas de la Carta de Naciones Unidas, una violación del principio de soberanía e integridad territorial. Y esto en cualquier parte del mundo tiene que condenarse.

Pero claro, la paz no puede ser una paz cualquiera: que sea una paz justa y tiene que ser una paz duradera. Y para que sea una paz justa y duradera, solo hay un término clave en esta ecuación que no puede fallar, y es que los ucranianos estén alrededor de la mesa. No vas a hacer una paz justa y duradera entre otros actores, sin contar con los ucranianos como los principales protagonistas en estas negociaciones. Eso por un lado.

– ¿Se sintieron acompañados por el gobierno argentino en esta situación? ¿En este enorme drama que se vive en Europa? ¿Notaron ningún cambio después de la llegada de Trump al poder? ¿Alguna forma distinta de ver el conflicto?

- Hay que ver un poco los votos que ha habido en Naciones Unidas. En fin, nosotros venimos trabajando con Cancillería desde el primer día. Ha habido matices, ha habido posiciones en las que hemos tenido… pero ya explicó en varias ocasiones el canciller Werthein la posición de Argentina en el último voto de la Asamblea General de Naciones Unidas y no tengo nada más que añadir al respecto. Simplemente, decir que seguimos contando con Argentina y seguimos trabajando con Argentina para una paz justa y duradera en Ucrania.

- Estamos trabajando en este sentido. La semana que viene tenemos a un director que viene de las Américas aquí y tendremos reuniones al respecto. Confiamos en que vamos a seguir trabajando con Argentina en una paz justa y duradera.

- La llegada del presidente Trump ha cambiado un poco el tablero. Vimos la reunión que mantuvo con el presidente Zelenski, pero luego ha habido otras. Ahora hay un acuerdo sobre minerales. En fin, como he dicho, todo lo que sea intentos para alcanzar esta paz cuanto antes, y que se alcance una paz justa y duradera con los ucranianos es algo que vemos con muy buenos ojos.

- Primero desde la Unión Europea hubo ya declaraciones de la presidenta de la Comisión Europea en las que lamentó esta escalada tarifaria. Segundo, desde la Unión Europea enseguida reaccionamos haciendo alguna propuesta constructiva con el cero por cero en tarifas, que de momento está eso, en negociación y hay una tregua de 90 días. Tercero, desde la Unión Europea consideramos y estamos totalmente dispuestos a negociar. Siempre vamos a darle máximo margen, máximo espacio, máxima oportunidad a las negociaciones. Y ahí estamos. Cuarto, consideramos que la relación transatlántica ha sido muy próspera. Somos los bloques quizás con mayor flujo de comercio a nivel mundial entre Estados de ambos lados del Atlántico y que consideramos que tenemos que seguir con esta dinámica. Y quinto, todas las opciones siguen encima de la mesa. Es decir, que si la Unión Europea tiene que reaccionar defendiendo sus intereses comerciales, lo haremos.

- Es algo que ya vimos también en el primer mandato de Donald Trump. Se nos preguntó ¿la Unión Europea dónde se sitúa entre China y Estados Unidos? Creo que tenemos, como decía el anterior Alto Representante la doctrina “My way”. Nosotros tenemos que encontrar nuestro camino entre, por un lado, Estados Unidos, y por otro lado, China.

Creo que la Unión Europea tiene que adaptarse a esta nueva realidad y no podemos seguir dependiendo de otros actores para forjar nuestro futuro y nuestra autonomía estratégica y nuestra seguridad. Seguridad interior, Seguridad exterior. Seguridad económica, seguridad energética, seguridad en materia de comunicación, seguridad sanitaria. Todo esto, la Unión Europea tiene que sacar las conclusiones de lo que ha pasado con la pandemia, de lo que ha pasado con la guerra de Putin, por ejemplo, en materia de suministro energético, de este paraguas de seguridad que Estados Unidos nos ha brindado durante muchos años y que en momentos se cierra…

- Bueno, vamos a ver. Seguimos trabajando y somos socios totalmente sólidos dentro de la OTAN. Pero bueno, no quita que nosotros seguimos contando con la OTAN, con Estados Unidos, evidentemente. Lo que tiene que hacer la Unión Europea y en lo que estamos trabajando es fortalecer el pilar europeo de defensa dentro de la OTAN. ¿Quiere decir esto? Pues quiere decir aumentar los gastos militares en cada uno de los países de la Unión Europea. Y esto también pasa no solo tanto por gastar más sino por gastar mejor. Esto quiere decir, una mayor sincronización, una mayor sinergia, una mayor interoperabilidad entre los 27 ejércitos, entre los 27 sistemas de defensa de los 27 países de la Unión Europea. Esto también pasa, evidentemente por mecanismos de financiación, ambiciosos, novedosos, creativos en materia de defensa, que es el plan de rearme que ha puesto la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, de 800 mil millones de euros encima de la mesa.

- Hemos tenido aquí toda la jerarquía de Bruselas. Eso muestra la importancia que se le da a Argentina, en Europa, en Bruselas. Y cuando vino la Presidenta fue una visita fructífera porque firmamos o fue clave para firmar -en un caso se afirmó y en otro se dejó para firmar un mes más tarde- dos memorandos de entendimiento, uno sobre energía y otro sobre minerales críticos. En energía, está aquí en este país la segunda reserva de gas del mundo y está previsto en el memorando los temas de gas. Nosotros consideramos el gas una fuente de transición, de aquí al 2050 y dentro del memorando el gas está previsto.

Eso, por un lado. Y luego está el memorando sobre minerales críticos y ahí se donde se destaca el litio en las tres provincias del norte como Catamarca, Jujuy y Salta, Y luego está el cobre en la provincia de San Juan, pues también son reservas de primer orden a nivel mundial, y donde ya empieza a haber cada vez más empresas europeas interesadas e invirtiendo. Hemos tenido muchos intercambios. Viajes de ida y vuelta de empresarios argentinos y de representantes provinciales, de representantes de la nación que han viajado a Bruselas y viceversa. En mayo, por ejemplo, ahora dentro de 15 días, vienen empresas europeas e instituciones financieras europeas a San Juan para el tema del cobre.

- Lo vemos con buenos ojos, evidentemente, porque eso lo que está haciendo es favorecer y ayudando a posibles inversores europeos a venir más.

– Le quería preguntar sobre el tema de Global Gateway y cómo se vincula toda oferta que tiene la Argentina de posibilidades de inversión y de desarrollo.

– Si podemos explicar Global Gateway ¿qué es concretamente y qué propone la Unión Europea?

– ¿Es la propuesta europea frente a lo que puede ser la Ruta de la Seda de China?

– ¿Qué puede aprender el Mercosur en la relación política interna de la Unión Europea después de tantos años de integración?

Han sido 75 años de estabilidad, de cooperación, de libertad. Yo soy producto de la Unión Europea, porque soy transfronterizo. Libertad de circulación de personas, de servicios, de capitales, mercancías. Y es un proyecto que nos ha traído a los europeos -a veces un paso adelante, otro atrás- pero que nos ha traído una prosperidad, una estabilidad y sobre todo, un periodo de paz sin precedentes. El más longevo de toda la historia del continente europeo. Es un proyecto todavía inacabado, es un proyecto imperfecto y es un proyecto que exige muchísimo tira y afloja, muchísimas concesiones, muchísima negociación. Todavía en Europa tenemos unas reglas de funcionamiento, quizás, un poquito obsoletas.

– ¿Se vuelve a Bruselas?

–. ¿Y qué se lleva de Buenos Aires y de su paso por Argentina?

– Para lo bueno y lo malo.

– Llegó con Alberto Fernández y se va con Javier Milei. ¿Se sintió mucho ese cambio?

Fuente: 1746787683

Compartir